No podemos decir que parece fue ayer cuando la pandemia con el virus comenzando su expansión nos obligó a suspender los Jueves Taurinos del Club. Han pasado dos años que nos han parecido infinitos desde aquel 10 de marzo de 2020, en el que tras el coloquio con el ganadero Pablo del Río, las actividades del Club y los Jueves Taurinos quedaron interrumpidos. En el año 2021 no fue posible su programación debido a las restricciones sociales de obligado cumplimiento que impedían materialmente la celebración de conferencias-coloquio en el salón del Club. En este año de 2022, la Junta Directiva de nuestra entidad ha apostado con determinación por la reaparición en los ruedos de los tradicionales Jueves Taurinos del Club Taurino de Pamplona ¡Va por ustedes!
El primer Jueves Taurino se celebró el día 3 el marzo a la hora tradicional de las 20,00. El protagonista fue D. Ignacio Ríos, empresario de la plaza de toros de Arnedo, quien hizo la presentación de la corrida extraordinaria celebrada en la plaza de toros de Arnedo en el corriente 19 de marzo, con toros de Jandilla y Vegahermosa para Morante de la Puebla, Diego Urdiales y Juan Ortega. La ilusión de volver sin restricciones a una plaza de toros, con un cartel atractivo, impregnó todo un ambiente de reencuentro con las conferencias-coloquios del Taurino. El Club organizó un viaje en autobús para este festejo .
El jueves 10 de marzo, dos años exactos de aquel último jueves taurino del año 2020, recibimos a un invitado muy especial: el maestro Francisco Javier Sánchez Vara. Este matador es tan desconocido para el público como respetado y valorado por el buen aficionado. El heroico ganadero Miguel Reta fue el moderador elegido por el Club para presentar la charla.
El pasado festejo de Céret fue el tema central de conversación. Entre Miguel Reta y el maestro existe una fuerte amistad y colaboración, con lo que al alimón recordaron y explicaron muchos de los aspectos internos que tuvo aquella corrida de toros que ha pasado a la historia. Muchos de los presentes estuvieron en la localidad ceretana y las palabras fueron del máximo interés para la concurrencia. Miguel ensalzó el papel del torero manchego delante de sus toros, quien fue no solo capaz de poner orden en una lidia que se escapaba de las manos del resto de los integrantes, sino de triunfar delante de su toro Rabioso. Sánchez Vara se mostró agradecido con el ganadero navarro y reconoció que su aplaudida vuelta al ruedo tras matar al toro de Reta le ha proporcionado un gran número de contratos para la temporada en ciernes.
Sánchez Vara es un gran torero que sabe hablar al aficionado de tú a tú con naturalidad. El maestro hizo un resumen de su carrera de matador de toros en nuestro salón: hijo de banderillero, ingresa con 9 años en la Escuela Taurina de Madrid y se convierte en un «niño prodigio», con 14 años llegó a torear 76 novilladas y ser el número uno del escalafón para su edad. Su maestro fue el recientemente fallecido Joaquín Bernadó y su mentor el también desaparecido ganadero Saboya. Como todo principiante, tuvo que empezar de cero y con su primer apoderado Ángel Teruel tuvo sus primeros triunfos en el Valle del Terror del Tiétar. En las duras corridas del valle castellano, Sánchez Vara supo conocerse a sí mismo y descubrir que su sitio en la tauromaquia no era la ensoñación inútil de convertirse en una figura taurina sino en ser un torero de encastes duros y de reconocimiento del aficionado. En muchas fases de su larga carrera los contratos no llegaban y Sánchez Vara tuvo que hacer las Américas. El torero desgranó, con su simpatía y picaresca innatas, variadas anécdotas de la tauromaquia rural hispanoamericana que hicieron las delicias de los asistentes a este segundo Jueves Taurino.
En la feria de San Isidro 2016 salió un toro inolvidable: Cazarrata, un saltillo avisado de embestida homicida al que Sánchez Vara supo lidiar y estoquear. Tras aquella tarde, la carrera de un torero al que le habían pronosticado que nunca triunfaría en Madrid fue catapultada hasta su punto actual, recientemente elegido como uno de la terna de próximo festejo del revolucionario proyecto 3puyazos.. El maestro dijo que él es, por encima de todo, un aficionado que ama su profesión, un oficio el de torero que requiere más disciplina, esfuerzo y sacrificio que arte… El torero criticó la tauromaquia actual con sus festejos repetitivos y anodinos que han sacado al público de las plazas por aburrimiento, recomendó “apagar el volumen“ cuando se vean festejos por televisión y puso la emoción del festejo de Céret de Miguel Reta como ejemplo del camino a seguir. Los aficionados sabemos que estas palabras son verdad y por eso se ha convertido en unos de los toreros más respetados y queridos por la afición.
En la Feria del Toro no le ha ido nada bien al maestro y reconoció que tiene esta espina clavada. La Meca le dio una oportunidad en 2008 con los Cebada Gago pero todo le salió mal en aquella tarde a nuestro invitado, quien no solo no pudo triunfar sino que acabó herido. El maestro expresó su ilusión de que le concedan una nueva oportunidad en Pamplona y al deseo le puso el nombre de Miura.
El coloquio acabó con un gran aplauso y un emotivo deseo de ver a este torero haciendo el paseíllo en la plaza de toros de Pamplona con la miurada en los corrales.
La cena posterior, cuya asistencia es libre, puso el broche a un espléndido Jueves del Club Taurino, durante el cual pudimos todos evadirnos durante un rato de la tensión del tiempo actual que vivimos.
JUEVES 17 DE MARZO 2022
De la mano del socio Jesús Gurpegui, la tercera jornada supuso para el salón del Club recibir la visita de una parte de la historia viva del campo del toro: D. Antonio Ortiz Domínguez, El Largo. Antonio ha sido mayoral prácticamente desde que nació, puesto que pertenece a estas familias cuyas generaciones se pierden en la memoria de las dehesas. A sus 66 años ya está jubilado del trabajo diario en el campo, pero su figura montado a caballo en las fincas de su ganadería perdura en el presente. Con su inseparable acento andaluz hondo, Antonio definió el oficio de mayoral como una forma de vida y no como un empleo: el mayoral debe acudir el primero a la finca para hacer la primera revisión a caballo del amanecer de la ganadería, detectar toros heridos para curarlos a la mayor brevedad y tener a punto los depósitos de pienso y abrevaderos. Un mayoral tiene que «tener en la cabeza a todas las reses de la ganadería».
Antonio ama la ganadería en la que ha nacido, se ha criado y ha trabajado toda su vida: la ganadería Benítez Cubero, referente del encaste Hidalgo Barquero, de procedencia cruzada en el siglo XIX de castas vazqueña y vistahermosa, con frecuentes pelajes berrendos en negro. La finca principal es «Los Ojuelos» en Marchena, con otras dos fincas sitas en Morón de la Frontera: «El Arroyo de las Rozas» y » Dehesa El Roble». El Largo nos explicó los tres hierros que manejan hoy en día: Benítez Cubero, Pallarés ( hoy indistinta en reatas de Benítez Cubero) y Buendía, reses estas diferenciadas de origen Santa Coloma y que pastan y son tratadas de forma independiente en la finca.
Antonio ha visto en su larga vida la evolución de la ciencia veterinaria y la implementación de los obligados saneamientos periódicos a las reses, explicándonos que la técnica es una ayuda pero no es la solución para encontrar el misterio de la bravura del toro. Sobre la controversia de las fundas, Antonio opinó favorablemente, argumentando que hoy en día los toros ya no crecen salvajes sino que están sujetos a muchos controles y las fundas suponen en la práctica «una subida más al cajón». El Largo recordó con resignación la caída de su ganadería en el siglo pasado, » nunca supimos el porqué de que se cayeran los animales…» y la decisión de dedicarse en exclusividad a los festejos de rejones, statu quo que Benítez Cubero mantiene con éxito en la actualidad. El viraje de la ganadería le supuso a Antonio dejar de venir a Pamplona, sobre lo cual manifestó su pena, » porque en Pamplona es donde mejor nos tratan…». Las últimas comparecencias de Benítez Cubero en Pamplona datan de la Feria del Toro de 1994 y del festejo de rejones de la feria de 1997.
Antonio expresó su pesimismo sobre la situación actual de la Fiesta, criticando el coto cerrado de ganaderías que dominan y conforman las ferias actuales; expuso que la luz debe entrar mediante la organización de novilladas que den oportunidades a todos, no en vano relató que, en su larga vida, ha visto a «tapias» dar lecciones de tauromaquia a figuras del toreo.
Durante toda su conferencia, Antonio Ortiz Domínguez, El Largo transmitió sus amores y afición al toro y a su vida de mayoral: » si volviese a nacer, volvería a ser mayoral».
El Santo, el pañuelico rojo y la cena final, la cual va ganando número de comensales, fueron el obligado final del Jueves Taurino.
24 MARZO 2022
En este Jueves Taurino hemos tenido al conocido veterinario Julio Fernández Sanz como conferenciante. Un extenso artículo suyo, coescrito por José Carlos Arévalo, fue el protagonista de la revista del Club Taurino de Pamplona 2021. En dicho trabajo, el autor exponía y describía su ambiciosa y revolucionaria propuesta de renovación de diversos útiles de lidia. La Junta Directiva de nuestra entidad apoya de forma comprometida a las propuestas de este reconocido científico, desde el convencimiento de que este es uno de los caminos para mejorar e impulsar la tauromaquia del siglo XXI.
Julio Fernández Sanz, en unión con el maestro en tauromaquia Manuel Sales, han diseñado una serie de cambios en múltiples instrumentos de lidia, con el fin de reducir riesgos para el torero, reducir daños para el toro y facilitar una lidia noble y justa del animal. El primero de ellos— las banderillas retráctiles-colgantes del maestro Sales— data del año 1992 y su implantación es ya generalizada en las plazas de toros, siendo por todos reconocido que favorecen la correcta colocación, facilitan el embroque a los diestros en las faenas de muleta y disminuyen el riesgo de lesión al torero por traumatismo facial.
El primero de los diseños novedosos de Fernández es la estructura de la divisa, mediante un sistema formado por un extremo interno cortante más fino que los actuales y un extremo romo que es el que queda situado sobre la piel del animal tras su colocación. De esta manera, en los casos en los que no se coloca bien y la divisa queda situada en región derecha del hoyo de las agujas del toro (la divisa debe clavarse en región delantera izquierda del hoyo de las agujas ), se evitan las lesiones manuales al diestro en la hora de clavar la espada.
La segunda de las propuestas se refiere al estribo del picador, siendo la misma el acolchamiento del metal de la protección con un material especializado que amortigua los impactos del toro y evita que sufra traumatismos craneales en los topetazos contra el caballo.
Las innovaciones más trascendentes del proyecto de Julio Fernández son las nuevas puyas y el nuevo modelo de espada.
D. Julio afirmó que el supuesto beneficio para el toro por los puyazos que le hacen sangrar es un mito falso de la tauromaquia. Los puyazos fuera de sitio son heridas para el toro que no lo atemperan ni lo hacen humillar durante la lidia, sino que lo descomponen o inutilizan para la lidia por lesionar estructuras óseas, nerviosas y viscerales. Su modelo de puya es más pequeña, de estructura cuadrangular y con extremo ligeramente vaciado. Este modelo de puya determina menos lesión en el toro, aspecto fundamental cuando el varazo cae trasero y caído, dificulta la mala práctica de barrenar por parte del piquero, favorece la penetrabilidad de la vara y facilita la rectificación del puyazo por parte de éste. D. Julio afirmó que en las lidias de prueba realizadas con su nueva puya, se observa que tras el tercio de varas, los toros embisten con mejores condiciones en la faena de muleta.
La espada tiene como cambio de diseño una hoja de superficie más fina y mas ancha en su extremo, así como mayor superficie de afilamiento. Este tipo de hoja favorece el movimiento de corte en el eje transversal izquierda-derecha, mientras el diseño tradicional de hoja tiende a girar sobre sí misma. El tipo de corte interno de la espada innovada favorece alcanzar los grandes vasos sanguíneos del toro y el rápido efecto letal de la estocada.
Julio Fernández defiende con argumentos científicos sus propuestas delante de todo el mundo de la tauromaquia. A fecha actual, no se trata de un proyecto puramente teórico. Sus innovaciones han sido probadas en la arena y han demostrado sus beneficios. En el año 2020 comenzaron las pruebas delante de animales en tientas y plazas, con estadísticas que ya alcanzan los 200 lidias en México y las 80 en España. El proyecto no ha encontrado la aceptación oficial del sector pero D. Julio ya ha conseguido algunos partidarios que están empleando sus útiles mejorados. Puede contarse entre los profesionales que ya usan las nuevas herramientas, nada más y nada menos que a maestros como Morante de la Puebla, picadores como Pedro Iturralde y casas ganaderas como la de Miura. La tauromaquia evoluciona muy lentamente, pero lo hace. Volviendo la vista atrás en la historia se puede observar cómo sucesivos y diferentes elementos han ido desapareciendo, modificándose o surgiendo en el devenir de los festejos. La tauromaquia tiene futuro en la medida que sepa progresar en su organización interna sin perder el astro alrededor del que todo gira que es un toro fuerte y bravo.
El último libro escrito por Julio Fernández Sanz tiene como título Descubriendo al toro de lidia. En esta importante obra, el lector interesado encontrará todos los aspectos de su proyecto dentro de la evolución histórica de la tauromaquia. El libro tiene como P.V.P. 30 euros y está disponible en Amazon y otras páginas libreras de Internet.
Los interesados en el artículo coescrito por Julio Fernández Sanz y José Arévalo que fue objeto de publicación en la revista del Club Taurino 2021, pueden dirigirse a nuestra dirección de correo electrónico ctaupamplona@gmail.com
31 MARZO 2022
MANOLO DE LOS REYES EN EL ÚLTIMO DE LOS JUEVES TAURINOS DE 2022
Texto y fotos: M.A. Coronado «El Choni».
Al hablar de Manolo de los Reyes, los que peinamos canas nos viene a la memoria, ese matador de toros andaluz, que un día aterrizó en Pamplona para torear una novillada (años 60) y gustaron sus maneras a los aficionados de entonces…aquí se quedó, aquí se doctoró y en Navarra entera toreó.
Pero hoy toca hablar de su hijo, Manolo de los reyes (Manolito), por separar vidas taurinas…
Nacido en Pamplona, lógicamente lo primero que tocó fue un balón de futbol y no le pegaba mal…que yo lo vi muchas veces jugar, hasta juveniles fue “manguiverde”.
Nos contó el cambio de tercio y explicó que casi fue sin querer, pero en los toros estaba su futuro.
Metidos en harina habló de sus comienzos y esa oportunidad por la cercanía con Francia, como poco a poco se fue haciendo un “nombre” en la tauromaquia del país galo. Sin olvidar una función puntual, los encierros de Pamplona donde disfruta y hace de doblador porque ha nacido aquí y lo tiene a orgullo.
Ahora mismo es un “tercero” que tiene su “caché” como capotero, banderillero y puntillero, que no es poco…., como dice él, va por libre, y allí donde lo llaman acude y no le faltan fechas, lógicamente siempre tiene matadores que lo llaman siempre que lidian.
También está en esa lucha por la defensa de los “trabajadores taurinos” y que se les reconozca sus derechos, cosa curiosa hablamos de aquí, España, cuna del toreo….cuando en Francia subvencionan incluidas las ganaderías.