No atender las órdenes o interferir en la labor de los pastores en los encierros será objeto de denuncia
El Ayuntamiento de Pamplona quiere poner en valor y reconocer la labor de los pastores en los encierros de San Fermín. Por ello, se va a modificar un artículo del bando municipal que se dicta con motivo de las fiestas para establecer como objeto de denuncia el hecho de no atender las órdenes de los pastores o interferir en el ejercicio de su tarea. El Grupo de Trabajo del Encierro se ha solidarizado, también, con el pastor denunciado en los juzgados por una presunta agresión a un corredor y ha querido respaldar el trabajo que realizan los pastores cada en cada encierro.
En cuanto a la modificación del bando, se añadirá en el apartado 5.3 del bando un nuevo párrafo. Ese apartado en el bando del año pasado señalaba que “para minimizar el riesgo de los participantes en el Encierro, las medidas de seguridad que lo regulan han de ser cumplidas con el máximo rigor, debiendo atenderse siempre las indicaciones del personal encargado de su vigilancia y regulación, así como las disposiciones que en orden a su celebración se especifican cada año en el Bando Municipal para las fiestas de San Fermín”.
Ese párrafo añadido mencionará expresamente a los pastores para que quede constancia de lo importante de su trabajo durante los encierros, con el siguiente texto o similar: “Especial atención deberán prestar los participantes a las órdenes dadas por los pastores, personal técnico encargado de guiar a la manado, no interfiriendo en su labor, atendiendo sus indicaciones y evitando cualquier situación que pueda interferir en su arriesgada tarea”.
El Grupo de Trabajo del Encierro, que en la reunión de hoy ha estado presidido por el alcalde de Pamplona, Enrique Maya, lo conforman, entre otros, el concejal delegado de Seguridad Ciudadana, el director de Seguridad Ciudadana, el Jefe de la Policía Municipal, un representante de cada grupo político con representación municipal, la Casa de Misericordia, la Agencia Navarra de Emergencias, representantes de la Cruz Roja y la DYA, el Servicio Navarro de Salud, la Federación de Peñas y colectivos que participan en el encierro como pastores, ganaderos, dobladores, corredores y carpinteros.
Conducta tipificada como objeto de denuncia
Se modificará, asimismo, el artículo 5 en su apartado 13 para que quede taxativamente prohibido y sea objeto de denuncia por parte de las fuerzas y cuerpos de seguridad no atender las órdenes de los pastores o interferir en el ejercicio de su tarea. Tal y como recoge el bando al final de ese mismo apartado, “las personas que realicen cualquiera de las actividades prohibidas y estén dentro del recorrido del Encierro serán inmediatamente desalojadas por los agentes de la autoridad y denunciadas por su actuación”.
Perfil del corredor del encierro y sanciones interpuestas
Asimismo, se han valorado medidas y acciones puestas en marcha el año pasado como las líneas en el suelo que no se deben sobrepasar, el vídeo con consejos para correr emitido en la plaza Consistorial todos los días o el cobro en el acceso a la Plaza de Toros. Por otra parte, se han facilitado los datos de corredores de los distintos encierros del año pasado. El más multitudinario fue el de domingo 13 con 2.924 personas en el recorrido, seguido del martes 8 con 2.506, el lunes 7 con 2.483 y el sábado 12 con 2.225 corredores. Los otros cuatro encierros no llegaron a las dos mil personas. El miércoles 9 participaron 1.822 personas, el jueves 10 un total de 1.927, el viernes 11 de julio 1.825 y el lunes 14, último día de fiestas, 1.414. En total, 17.126 corredores, un 4% menos que en el año 2012, cuando se alcanzaron los 20.669.
Los datos de las encuestas realizadas entre los corredores reflejaron que un 56% de los corredores era extranjero, un 8% de Pamplona, un 6% del resto de localidades de Navarra y un 30% españoles. Cuatro de cada cinco corredores tenía menos de 35 años, el 17% entre 35 y 55 años y casi un 3% superaba los 55 años. Además, casi dos de cada tres participantes, un 65%, corría por primera vez y apenas el 15% participa de forma habitual. Sobre la preparación y concienciación para la carrera, el 90% de los corredores dijo que conocía las normas del encierro y el 99% sabía los peligros a los que se enfrentaba si participaba, incluso el de perder la vida. Tres de cada cuatro, el 75%, se autodefinió como corredor perfecto ya que durmió la noche anterior, cumplió las normas, conocía los peligros y era consciente de que puede llegar a morir.
El Ayuntamiento de Pamplona interpuso los pasados Sanfermines 26 sanciones por incumplimiento de la ordenanza del Encierro, 25 de ellas de carácter grave y 1 de carácter leve. Más de la mitad de esas sanciones, en concreto 15, tuvieron que ver con la utilización de medios de reproducción de imagen o sonido dentro del recorrido del encierro. Se multó a cinco personas por tocar a las reses o llamar su atención en el recorrido o en el ruedo de la plaza y a dos por actuaciones que dificultaban el normal desarrollo del encierro de forma grave. Además sancionó a una persona por correr hacia las reses y sobrepasar la señalización prevista y a otra por arrojar objetos en el recorrido una vez que se había limpiado. La sanción leve se le impuso a una persona por estar a la espera de que pase el encierro en rincones del recorrido.
(Fuente y foto: www.noticiasdenavarra.com)